Hoy es el Día del Trabajador y han pasado 30 días desde mi última sesión de libros. Ha sido un mes revolucionario, con un viaje a Madrid que me encantó y plagado de sustos. Me ha dado por la lecturas políticas; la vida de Ernesto Guevara me ha parecido muy fascinante y llena de contradicciones. Luego me he ido por todo lo contrario y me atreví con Mein Kampf y Hitler por la que curiosamente no me llamaron sucio nazi en ninún bus. Y todo regado con unas dulces poesías venidas de mitad del campo. Un mes bastante completo.
Che Guevara. Una vida revolucionaria
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Amor, rebeldía, libertad y sangreEste libro de Manolillo Chinato es el primer poemario que he leído completo. De otros, como Campos de Castilla, había disfrutado de poemas sueltos y fragmentos. Tampoco es que me lo haya leído de un tirón. A lo largo de unos meses he ido leyéndolos poco a poco, disfrutando de los versos de Chinato, musicándolos silenciosamente y acordándome de la Saga Uoho, tan influida por este genio del campo. |
Mi luchaComo bien dice Adolf Hitler en los primeros párrafos, este es un libro para los hijos del nacional-socialismo. Combina de forma caótica elementos de su propia vida con sus ideas políticas. Se puede considerar una mezcla de autobiografía, panfleto político y breve historia de la Alemania de principios de siglo. |
Y comienzo el mes de las flores con otros 3 libros en bajo el brazo. Ya le he dado una oportunidad a la saga del Mundodisco. Casi lo he terminado asi que en un mes hablaré de él. Espero haber terminado para entonces El Ocho de Katherine Neville; uno de esos libros que he deseado leer desde hace años pero para el que no he encontrado tiempo.
Ahora es el momento.